La sombra, desde Platón hasta Jung, simboliza ilusión, misterio, amenaza. Tomando como referencia la metáfora de la caverna platónica, en Apología de las sombras se enfrentan poesía y filosofía, realidad e ideal, verdad y mentira.
La escritora Silvia Rins esboza una teoría del conocimiento a través del amor, ya que la erótica del discurso filosófico y del poético convergen en el deseo, la búsqueda, la seducción. Pero este libro se sitúa en la tradición de la poesía occidental para refutarla, tergiversarla o desvirtuarla con el uso del lenguaje coloquial o científico, y una contundente y demoledora ironía. El mundo de las ideas y la materia, las apariencias y la esencia, la pulsión y el recuerdo, luchan cuerpo a cuerpo, igual que las composiciones en prosa y verso que se suceden y entrelazan. Los lectores irán despojando de sus máscaras al enamoramiento, al sexo y al amor a través de numerosas voces poéticas, bajo las cuales subyace la voz heterodoxa e irreverente de la autora.
Los dibujos de Antonio Beneyto acompañan este viaje iniciático que sabemos dónde empieza pero no dónde acaba:
Hay autopistas anchas y vacías que llevan a ninguna parte, como hay puertas que no se abren porque sencillamente no existen. Entonces llega la hora humana del regreso y la aprehensión intacta del vértigo a la oscuridad durante el ascenso y la seguridad de estar vivo.
También puedes continuar, si eres audaz o estás borracha, hacia lo imposible.